- Área: 640 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Angélica Ibarra
Situado sobre una de las calles más importantes de la Colonia Roma, en la Ciudad de México, el proyecto del Impact HUB es una transformación de unas oficinas bancarias en un área de trabajo colectivo.
El concepto surge a partir de la idea de un nodo de movimiento e interacción de gente, como lo son una estación de tren o un aeropuerto. Así, el programa arquitectónico se distribuye con un área central – la estación abierta – donde gente trabajando como freelancers puede hacer uso temporal de las diferentes islas de mesas, que a su vez facilitan que cada usuario pueda escoger el tipo de interacción que desea tener con otros emprendedores. Siguiendo la analogía de una estación de tren, se agregaron de un lado una serie de oficinas privadas – contenedores – para empresas emprendedoras que requieren de mayor privacidad sin perder el deseo de compartir el espacio y ciertas facilidades con otros usuarios. Dichos contenedores se generaron a partir de una cancelería corrediza de vidrio blanco que permite a cada contenedor escoger el grado de conexión que tienen con la estación abierta.
Del otro lado se ofrecen una serie de espacios compartidos, como la estación de lectura, que se visualiza como una sala informal donde juntas de lluvias de ideas pueden ocurrir, con muebles sobre ruedas que permiten la adaptación del espacio. La estación de juntas es un espacio formal para reuniones más privadas. Las cabinas, para hacer reuniones más discretas, brevesy personales. La zona de café de autoservicio, para relajarse y tomar un breve descanso.
En cuanto a su materialidad, las áreas de trabajo establecidas como la estación abierta y los contenedores, se trabajaron con recinto para darle al espacio un sentido de plaza, de espacio público. En contraste, las actividades compartidas se ubican sobre una plataforma de madera blanca que obtiene una calidad de puerto de observación hacia el resto del espacio. La iluminación se articula con puntos de cobre aparentemente azarosos en el espacio, permiten que el mobiliario pueda ser reconfigurado una y otra vez sin perder relación funcional con las lámparas.
La puerta principal y la celosía de la estación de juntas son de cobre, cuyo comportamiento material absorbe fácilmente las huellas digitales, lo cual lo convierte en un registro visible y transformable de toda la gente que ha pasado por el HUB.
La fachada comunica el dinamismo interno del HUB al exterior. Los elementos verticales que sirven de filtro lumínico, van alterando su geometría en una secuencia numérica, generando una ilusión óptica de movimiento. Al estar ubicada arriba de un banco, fue tratada como un faldón de color suspendido sobre el volumen original que baja en un extremo como gesto para marcar el acceso.
Así, el proyecto de Impact HUB continúa la exploración de Ludens en aproximarse a la arquitectura como una suma de elementos flexibles que permiten al usuario adaptar y conquistar el espacio respondiendo a sus necesidades particulares, tomando cada elemento arquitectónico como una herramienta de interacción y fricción entre espacio y espacio, entre espacio y usuario y entre usuario y usuario.
